Receta El Vesubio: arroz con leche casero

Entre las recetas caseras hay un postre típico de la cocina que resalta: el arroz con leche, porque se trata de una preparación muy sencilla de hacer y que da un cariño al paladar cuando necesita de un dulce que lo reconforte.

 

En El Vesubio nos encanta compartir esta preparación de arroz con leche casero, porque es un viaje seguro a la infancia, cuando en la hornilla siempre había una olla cociendo ese dulce que alegraba las tardes.

 

Receta casera de arroz con leche

 

En una olla se mezclan muy bien todos los ingredientes. Primero se coloca la leche luego el azúcar, mezclando con fuerza hasta que quede una preparación bastante homogénea. Luego se añade el arroz en la leche azucarada, se coloca la cáscara del limón finamente rallada y se mezcla. Por último, se suma la pizca de bicarbonato El Vesubio  para que la leche no se corte y la preparación tenga consistencia.

 

Cuando todos los ingredientes están bien mezclados, es la hora de llevar la olla al fuego, con una llama media alta para que hierva con fuerza. Una vez que rompa a hervir la preparación, hay que dejarla en el fuego unos diez minutos, siempre vigilantes de la cocción.

 

Después de ese hervor durante diez minutos, debe retirarse la olla del fuego. Recomendamos dejarla reposar unos cinco minutos para que asiente. Se lleva nuevamente al fogón, con una llama media alta para que termine de ablandarse el arroz, durante aproximadamente una hora.

 

El secreto que te damos es resolver frecuentemente la mezcla con una cuchara de madera haciendo la forma de un ocho para evitar que el arroz se pegue y se queme.

 

 

El secreto que te ofrecemos en sodas El Vesubio es revolver frecuentemente la mezcla con una cuchara de madera haciendo la forma de un ocho para evitar que el arroz se pegue y se queme.

 

Si durante la preparación de esta receta casera de arroz con leche se ve que la mezcla se está secando mucho, puede agregarse un poco más de leche.

 

Un clave en la receta casera de arroz con leche es saber que hay quienes prefieren que el arroz quede más al dente (es decir, un poco duro) y quienes lo prefieren más blando. Una vez que el arroz esté en el punto deseado, se retira de la hornilla. Si se prefiere comer el arroz con leche casero caliente, es hora de servir en una cazuela pequeña y espolvorear con canela al gusto. Pero si se quiere comer un dulce frío, se lleva la mezcla a la nevera. Luego se sirve en porciones individuales, podría ser en una copa para helado, y se espolvorea canela.

 

¡Y listo! Ya se tiene el arroz con leche casero con ese toque de sodas El Vesubio. Es el postre ideal para compartir en la merienda y tan solo aporta 250 calorías, por lo que puede consumirse perfectamente cuando se está a dieta.

 

Si quieres encontrar más recetas tan ricas y saludables como esta, visita nuestro recetario y alegra tu paladar todos los días con preparaciones fáciles, prácticas y muy sabrosas.